La Metodología y la Revolución Bolivariana
La Metodología y la Revolución Bolivariana (publicado originalmente en Revolucionaldía el 03/08/2011)
Para hacer una Revolución Socialista, hace falta un complejo proceso de planificación que debe atravesar desde su planteamiento inicial, el más preciso diagnostico de la sociedad y además, un riguroso examen de factibilidad, para permitir entre otras cosas, proyectar el tiempo de aplicación del plan de acción, obedeciendo siempre al comportamiento de las variables, muchas de las cuales son susceptibles de cambios impredecibles, constituyéndose estos en los indicadores que permiten determinar cuándo acelerar, corregir e incluso, redirigir las tácticas que consuman el logro de los objetivos planteados, sin perder de vista la premisa que todo proyecto exitoso, debe cumplir periódicas evaluaciones, para medir el impacto de la ejecución en sus diferentes fases.
Lo expuesto anteriormente obedece a explicar el viraje táctico, más no estratégico del comandante Chávez, dirigido a ganar espacios políticos de aceptación en la clase media renuente a los cambios revolucionarios, que requiere atención, entendiéndosele como parte de nuestra totalidad nacional y tiene que aportes que brindar, al desarrollo integral de la patria.
Este accionar táctico ha traído consigo una reacción crítica en algunos sectores izquierdistas, cuyo accionar en el tiempo dejó testimonios contradictorios, como por ejemplo el pacto con el segundo gobierno del fallecido ex presidente Rafael Caldera o la utilización de la tribuna mediática fascista Globovisión, para literalmente, atacar al gobierno del comandante Chávez.
Por ello, esa ridícula actitud de abrogarse una “Moralidad Revolucionaria” a “Toda Prueba”, es totalmente cuestionable. Pero se comprende. Se trata del “momento”, de la coyuntura política, de los escenarios sociales, de la realidad nacional y de la realidad internacional, de las condiciones económicas, de la temperatura social, es decir, de variables dependientes.
Ya empezaron los ataques de nuevo, como globos de ensayo, velados, sigilosos, calculados; así como también inmorales y esencialmente contradictorios.
No estamos copiando fórmulas para construir el Socialismo, estamos creando un Socialismo propio; y no sigan creyendo que el Chavizmo solo actúa para defenderse, también aprendimos a tomar la ofensiva.
Para hacer una Revolución Socialista, hace falta un complejo proceso de planificación que debe atravesar desde su planteamiento inicial, el más preciso diagnostico de la sociedad y además, un riguroso examen de factibilidad, para permitir entre otras cosas, proyectar el tiempo de aplicación del plan de acción, obedeciendo siempre al comportamiento de las variables, muchas de las cuales son susceptibles de cambios impredecibles, constituyéndose estos en los indicadores que permiten determinar cuándo acelerar, corregir e incluso, redirigir las tácticas que consuman el logro de los objetivos planteados, sin perder de vista la premisa que todo proyecto exitoso, debe cumplir periódicas evaluaciones, para medir el impacto de la ejecución en sus diferentes fases.
Lo expuesto anteriormente obedece a explicar el viraje táctico, más no estratégico del comandante Chávez, dirigido a ganar espacios políticos de aceptación en la clase media renuente a los cambios revolucionarios, que requiere atención, entendiéndosele como parte de nuestra totalidad nacional y tiene que aportes que brindar, al desarrollo integral de la patria.
Este accionar táctico ha traído consigo una reacción crítica en algunos sectores izquierdistas, cuyo accionar en el tiempo dejó testimonios contradictorios, como por ejemplo el pacto con el segundo gobierno del fallecido ex presidente Rafael Caldera o la utilización de la tribuna mediática fascista Globovisión, para literalmente, atacar al gobierno del comandante Chávez.
Por ello, esa ridícula actitud de abrogarse una “Moralidad Revolucionaria” a “Toda Prueba”, es totalmente cuestionable. Pero se comprende. Se trata del “momento”, de la coyuntura política, de los escenarios sociales, de la realidad nacional y de la realidad internacional, de las condiciones económicas, de la temperatura social, es decir, de variables dependientes.
Ya empezaron los ataques de nuevo, como globos de ensayo, velados, sigilosos, calculados; así como también inmorales y esencialmente contradictorios.
No estamos copiando fórmulas para construir el Socialismo, estamos creando un Socialismo propio; y no sigan creyendo que el Chavizmo solo actúa para defenderse, también aprendimos a tomar la ofensiva.
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