PSUV: ¿División o Contradicciones Necesarias?
Con mucha atención he observado y leído posiciones críticas
que argumentan una división dentro de las filas del PSUV, al punto incluso, de
generar una especie de matriz que usó acusaciones, descalificaciones, quejas,
denuncias, viejas heridas, interpretaciones, tergiversaciones, en fin, una
extensa gama de elementos que el Revolucionimetro no fue capaz de detectar.
¿Cómo hacer una
revolución sin discusión?
Ciertamente, muchos de los factores expuestos son válidos
desde mi criterio. Otros, no. Y como toda dinámica política tiende a encender
las pasiones, los verbos aumentaron de temperatura, llegando a un clima en
donde los pescadores de rio revuelto, se babearon considerando que su
oportunidad se estaba cocinando, es decir, en las turbias mentes imaginaron “ya
se dividieron, necesitan votos para la AN, es el momento de fomentar la
división”.
El estudiante de
Washington dijo que la derecha endógena no existía.
Los calculistas políticos morbosos enredados en las telarañas
de la ambición, tienden a obviar condimentos esenciales de la política. Es y
continuará siendo su característica. Lógico pues en sus cálculos, que la
derecha endógena y exógena no perciba que en esta Patria de Bolívar y Chávez
hay una verdadera Revolución. Su síntoma irrefutable es la dialéctica
ocasionada por la búsqueda de la viabilidad más eficiente de construir un
Socialismo propio, sin calco ni copia, citando a Mariategui.
No es nuestro
invento, pero si, nuestra construcción.
¿Qué hay corrientes desencontradas? Si. Es necesario, útil e
imprescindible. Esta hermosa tierra paridora de rebeldes, contestatarios, disponedores
y brejeteros que trascienden las palabras tratando de encontrar hechos que
consoliden un proceso Revolucionario deseado aquí y mas allá de nuestras
fronteras. De ese tamaño es la responsabilidad que gustosamente llevamos en nuestros
lomos, conscientes del aporte que dejamos a la humanidad.
El Capitalismo
definitivamente, no es una opción.
A veces siento un remolino de emociones, ocasionadas por
disfrutar al pueblo discutiéndose, en la calle movilizado, asumiendo temas sin
timidez ni complejos y de repente, me viene a la cabeza el recuerdo de nuestro Comandante
Infinito, especialmente para decirle lo que le gritó su hermano Adán en triste
hora, “aquí llevamos tu morral Hugo”.
El Chavismo es
indivisible.
Comentarios
Publicar un comentario