GUERRA ES GUERRA
Una Guerra presupone el conflicto entre dos o más
partes por razones políticas, ideológicas, religiosas, económicas, entre otras,
cuyo fin último es derrotar al oponente. Y, aunque existen convenios que las “regulan”,
ya no hay quien respete dichas “regulaciones”, salvo, el gobierno de la
República Bolivariana de Venezuela, embestido una, otra y otra vez por el
imperio, a través del formato de Guerra no convencional en nuestro caso, con
efectos devastadores.
¿Hay una
Guerra en Venezuela o no?
Suficientes hostilidades directas ha soportado la
Revolución Bolivariana y Chavista desde el año 1999 por diferentes flancos y
gobiernos, encabezadas sin disimulo por los Estados Unidos de Norteamérica,
quien utiliza su tejido internacional (destacando a Canadá, Colombia, Chile en América),
acompañado de la Unión Europea (con España
como protagonista) y también, usando todo el peso de su poder comunicacional.
Tenemos quince
años sufriendo hostilidades
Por otro lado, el imperio articula a las oligarquías
locales y partidos políticos de derecha e “izquierda” disfrazada para combinar
un atroz ataque ideológico, de eficaz impacto pero, de impredecible resultado
en nuestro territorio, tal y como lo son las Guerras. Cabe destacar, que lo más
irresponsable de quienes le hacen el juego a la prepotencia del gobierno
yanqui, están contribuyendo a llevar al país hacia un absoluto caos y magnitud,
que les hará victimas de su propia brutalidad, inconsciencia, estupidez y
entreguismo.
La Derecha Nacional
está llena de Terroristas
Peeeeero, como la pelea es peleando, siendo que tenemos
un vasto sector de nuestro pueblo alerta y dispuesto para cualquier escenario,
es donde me lanzo a exigir a los líderes de la Revolución definir bien los
términos en el sentido que, no importa el apellido, entiéndase, económica, de
4ta Generación, asimétrica, psicológica, mediática u otra, sino que se llame
por su nombre a secas, GUERRA. ¿Por qué? Porque a fin de cuentas, eso, es lo
que es. Y por tanto, debe tratarse como tal. Es decir, si no hay claridad que estamos inmersos en un conflicto bélico, definitivamente somos unos pendejos.
Las cosas
deben llamarse por su nombre
Ahora bien, definir estar en GUERRA, permite asumir estrategias y tomar decisiones
del mismo o mayor envergadura, que las agresiones a la cual seguimos sometidos, sin
usar las mismas armas que usan nuestros adversarios, tales como el terrorismo o
asesinato. Me refiero por ejemplo a un comerciante acaparador, además de su
delito, debe agregarse, traición a la patria, siendo que, nos encontramos en medio de
una GUERRA. Si es un funcionario público, con más razón todavía; y si es
extranjero, enviarlo hacia su país de origen, sin derecho a regresar. No hay ninguna duda que la Revolución depende de un
Gobierno Justo sí, pero igualmente Fuerte.
Tras cada
perdón, hay una nueva traición.
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