CARGOS DE CONFIANZA EN UN GOBIERNO REVOLUCIONARIO.

Según declaraciones emitidas por Diosdado Cabello en su visita al estado Nueva Esparta, un alto porcentaje de cargos de confianza, también conocidos como cargos 99, manifestaron su voluntad de salir del gobierno de nuestro Presidente, Nicolás Maduro.

Es decir, de libre remoción.

De acuerdo a lo que dice nuestra constitución, debe respetarse la libertad de pensamiento, opinión y expresión, así como también debe garantizarse el derecho al trabajo, pero, estamos hablando nada menos que de cargos claves, propios para influir en la calidad, eficacia y eficiencia en la gestión del gobierno.

¿Zamuro cuidando carne?

En simple matemática, uno de cada tres gerentes que toman decisiones técnicas en el gobierno, son contra revolucionarios, información nada nueva para el pueblo, cotidianamente sometido a las agresiones laborales, burocráticas y de negligencia, por parte de quienes no solo sabotean, sino que lo vociferan a los cuatro vientos, en medio de la indolencia general, incluso de los “partidos revolucionarios”.

El pueblo denuncia pero nadie lo escucha.

Saltan a la cabeza un montón de preguntas, pues no solo se trata que esas personas tengan esos cargos sino ¿Cuánto han influenciado en la desviación de los objetivos del gobierno? ¿Son estricta y técnicamente imprescindibles? ¿Gobernando la derecha, tendríamos la misma oportunidad? ¿Si ya firmaron contra Chávez, quien creyó que cambiarían? Y lo más sospechoso de todo ¿Quién los colocó ahí?

Tenemos un estado dentro del estado.

Con esta inocencia es cuesta arriba ganar una batalla de tanto peso, sometiendo debiluchos mentales a la poderosa tentación del corrupto capitalismo, lo cual hace que invoquemos a nuestro Libertado Simón Bolívar  “…tras cada perdón habrá una nueva traición…”

   

Una cosa es ser bueno, otra muy distinta es ser tonto.